ESPIRITU SANTO ENSEÑAME HACER TU VOLUNTAD

ESPIRITU SANTO ENSEÑAME HACER TU VOLUNTAD

“Porque tú eres mi Dios tu Buen Espíritu, me guía a tierra de rectitud“ Salmo 147:10. Estamos  acostumbrados hacer siempre nuestra voluntad, tanto que cuando llegamos al plano de lo espiritual,  la oración  también la queremos manejar a nuestro querer.  Creemos que la Oración es solo para pedir a Dio9s y que el Conteste  pronto. El salmista proclama El Reconocernos necesitados de la ayuda idónea de Dios  Del Buen Espíritu. Es la docilidad que poco se encuentra el creyente; es necesario reconocer y aprender a vivir  que NO SOY YO SINO MI  ALMA, LO SUBLIME DE MI SER  QUE SE UNE AL BUEN ESPIRITU DE DIOS.

LA ORACION ESTA  RODEADA DE MILES DE FUERZAS NEGATIVAS

Que impiden que fluya la bendición por la que tus estas orando. La más grave de las fuerzas negativas es la  Falta de Fe, la paciencia en el tiempo de la espera  de la bendición, aprender a esperar en el tiempo de Dios no en tus tiempos, la falta de Humildad se nos olvida  de donde nos saco el Señor. Y oramos no pidiendo la Voluntad de Dios sino que se haga nuestra voluntad a pesar de que conocemos la dureza de nuestro corazón que no hemos podido aprender a perdonar, acuérdate que Dios te conoce que ha Dios nadie lo ha podido engañar. La voluntad de Dios establece una relación divina, Mateo 12:50.

LA VOLUNTAD DE DIOS EN LA ORACION, Lucas 18:9-14.

·         Ver. 11-12: Oraba exaltándose así mismo, yo tan bueno, cumplidor de la Ley que dicen que no son como aquellos pecadores, Dios no tiene que bendecirte porque eres bueno, ya que esta es tu condición de salvado por Cristo, tu conversión es el Tiempo de Dios en tu vida, no es tu tiempo, no seamos arrogantes y no le robemos la Grandeza a Dios. Que sabes tú que aquel que se oculta para no ser señalado como pecador, publicano, por una sociedad religiosa, hipócrita, timorata, que no son más que religiosos, prepotentes, que se creen dueños de la voluntad de Dios que no se acuerdan de donde los saco el Señor.

·         Ver. 13-14: Ahí está un arrepentido confesando su nada ante el Único que tiene poder para levantarnos Cristo. Ese publicano pecador humillado hasta el alma evitando ser vistos por los buenos de turno pero ese logra tocar la voluntad de Dios, las entrañas de misericordia de Dios que desciendes ante la pequeñez de los suyos sin tantas palabras sino cargado de su propio dolor, sus lagrimas, sus temores, su pobreza, su enfermedad; esa oración de tu alma sencilla y humilde a tocado a Cristo antes de que tu llegues a tu casa has hallado gracia justificado a través de esa humilde oración.

F    FUNDACION DE SERICIO & ORACION "YO SOY DE CRISTO", 2012.